Derechos de los niños durante un juicio.
- Tienen derecho
a un trato digno y compasivo: Esto significa que siempre se les debe tratar
con tacto, pasar con ellos el tiempo estrictamente necesario y hablarle en un
lugar donde se sientan cómodos y seguros.
- Tienen derecho
a la protección contra la discriminación: Esto significa que tienen derecho
a recibir un trato justo. Todos son distintos y tienen ideas y tradiciones
distintas. Estas diferencias forman una especie de arco iris; cada color aporta
al mundo una belleza especial, haciéndolo más interesante. Es importante que
las diferencias entre las personas sean respetadas, incluidas la diferencia de
edad, de educación y de entorno familiar.
- Tienen derecho
a ser informado: Esto significa que tienen derecho tanto los propios niños
como sus familiares a que se les comunique lo que está ocurriendo con el
sospechoso o con las ayudas que están a su disposición.
- Tienen derecho
a ser oído y a expresar opiniones y preocupaciones: Esto significa que
tienen derecho a dar su opinión, a ser escuchado y a que se te tome en
consideración. Cuando los niños crezcan, tendrán más responsabilidad para
adoptar decisiones que repercuten en su vida.
- Tienen derecho
a una asistencia eficaz: Esto significa que tienen derecho a que se les
ayude como por ejemplo en asistencia de profesionales capacitados, asistencia
jurídica o servicios educativos.
- Tienen derecho
a la intimidad: Esto significa que tienen derecho a no revelar información
personal, a vivir sin vigilancia, hablar con cualquiera sin que nadie esté
presente o excluir al público cuando vaya a prestar testimonio. Todo esto es
muy importante ya que cuando un niño interviene en un proceso judicial solo
tienen derecho a saberlo personas de su confianza.
- Tienen derecho
a ser protegidos de sufrimientos durante el proceso de justicia: Esto
significa que tienen derecho a ser protegido contra los malos tratos desde el
momento en que se descubre un delito, en el transcurso de la investigación y el
juicio correspondiente.
- Tienen derecho
a la seguridad: Esto significa que tienen derecho a sentirse seguros y a
que no se hagan daño. Si un niño víctima o testigo de un delito corre riesgo de
intimidación, amenazas o daños, se deben adoptar medidas para aseguren que el
niño está a salvo, por ejemplo el no entrar en contacto con el acusado,
mantenerlos en un lugar que esté en secreto su paradero o mantener al acusado
en arresto domiciliario.
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